
El arquitecto Juan Domingo Santos tiene desde hace casi 30 años su estudio en la torre de la alcoholera. Foto: Juan Domingo Santos
La Junta de Andalucía ha declarado Bien de Interés Cultural (BIC) la azucarera de San Isidro y el Ingenio de San Juan, ubicados en la barriada de Bobadilla (Chana). Desde ahora, la azucarera que sobrevive al abandono de años, pertenece al Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz, bajo la tipología de Lugar de Interés Industrial.
Este nuevo BIC, ubicado en un barrio industrial al que da nombre la estación de ferrocarril de Bobadilla, está compuesto por diferentes instalaciones que estuvieron relacionadas con la extracción de azúcar y sus derivados. En su origen, se trataba de dos recintos diferentes, denominados de San Isidro y San Juan respectivamente, ambos dedicados a la extracción de azúcar de remolacha, que se unificaron en 1929 y que son considerados una única entidad patrimonial.
La delegada territorial de Educación, Cultura y Deporte, Ana Gámez, ha calificado este recinto como “uno de los mejores ejemplos de la arquitectura industrial de la provincia”, ya que, a diferencia de otros recintos fabriles en los que prima más el aspecto pragmático, en la azucarera de San Isidro la dimensión arquitectónica tiene un gran interés, con sistemas constructivos novedosos para la época que se ampliaron en varias ocasiones, manteniéndose inalterables hasta nuestros días, tal y como quedaron al cierre de la fábrica a inicios de los años ochenta.
Gámez ha explicado que “este complejo azucarero constituye uno de los hitos más relevantes del proceso de industrialización granadino”, por lo que se convierte en “un documento histórico de excepcional importancia para comprender la trayectoria social y económica de la industria granadina, un testimonio material de una forma de vida hoy desaparecida, pero que marcó Granada durante gran parte del siglo XX”.
Con esta calificación, el recinto azucarero integra una lista de 372 lugares patrimoniales de carácter inmueble en la capital granadina, según el registro ofertado por la Guía Digital de Patrimonio Cultural de Andalucía, una herramienta puesta en marcha por la Consejería de Educación, Cultura y Deporte que permite obtener de forma integrada el conjunto de información patrimonial disponible por cada uno de los municipios andaluces a partir de diferentes recursos de información: imágenes, cartografía, recursos electrónicos o bases de datos.
Proyectos para la azucarera de San Isidro
Los terrenos de la azucarera de San Isidro fueron adquiridos a Ávila Rojas en 2007 por un holding de empresarios granadinos que pretendía desarrollar un centro de ocio con hotel, restaurante y edificio de oficinas, dentro de un Plan Especial aprobado en 2004 y que recurrió el Estado porque se añadían 1o.000 metros no incluidos en el PGOU, un plan que llegó al Supremo y que terminó ganando el Estado. Este fallo obligó al Ayuntamiento de Granada a retrotaer las actuaciones al minuto cero y desde entonces no se ha vuelto a proponer otro plan.
En 2012, ese grupo de empresarios propuso trasladar hasta allí la estación del AVE, una idea que el alcalde primero acogió con entusiasmo, para luego desecharla. Parte de los terrenos han sido expropiados por Adif para la llegada de la alta velocidad a Granada. Hace un año, el PSOE hizo público que los propietarios de los terrenos pedían al Ayuntamiento una indemnización de 17 millones de euros por las pérdidas derivadas de la imposibilidad de desarrollar el proyecto. «Que lo expropien y lo mantengan ellos», comentó a GranadaiMedia José Julián Romero, uno de los promotores propietarios de los terrenos al conocer la noticia de la declaración como BIC de la azucarera.
La azucarera de San Isidro es un tema habitual en las juntas de distrito de la Chana. Los vecinos muestran su preocupación por la existencia, denuncian, de perros peligrosos que no están atados.
En su programa electoral para las municipales de 2011, Izquierda Unida propuso recuperar la antigua azucarera como «centro de creatividad» para jóvenes. La idea, precisó entonces Paco Puentedura, era usar este espacio para ensayos de teatro y artes escénicas e ir dotando el lugar como zona de exposiciones y locales de grabación para grupos musicales.
A pesar de su abandono, el edificio es desde hace casi 30 años el estudio del arquitecto Juan Domingo Santos, que incluso ha llegado a elaborar un proyecto para convertir en lofts algunas de las estructuras de la azucarera.
[…] en su primera casa reaprovechaba una alberca existente, en el proyecto de reciclaje de la Fábrica Azucarera San Isidro (2007) se proponen dar nueva vida a una instalación industrial abandonada. El recurso a la mirada […]
Carmen Moreno Alvarez 1976 | un día | una arquitecta