Se empezó a hablar de ella a finales del siglo pasado. Ya en éste llegaron a hacerse algunos trámites burocráticos previos a su construcción. Luego el proyecto pareció caer en el olvido, pero no del todo porque periódicamente algunos volvían a sacarlo a la palestra, sobre todo cuando se aproximaban unas elecciones, aunque nunca avanzó más allá de las noticias en la prensa. Ahora, en septiembre de 2021, la idea se retoma. La Junta de Andalucía anuncia que se hará un estudio para establecer si es o no viable. La Ronda Este, que así dieron en llamar a la autovía sobre la que va este artículo, retorna siempre. Tiene más vidas que un gato.
En 2009, el Patronato de la Alhambra se opuso de forma tajante a la construcción de la Ronda Este por entender que suponía un «impacto inasumible» sobre el Valle del Darro
Es hora de recapitular: allá por 1998, cuando el alcalde de la capital era Gabriel Díaz Berbel, la ciudad ya tenía una ronda de circunvalación, pero no era estrictamente una ronda porque no la rodeaba por completo. Acababa por un lado en Albolote y por otro en los túneles del Serrallo. Se fraguó entonces la idea de completar el círculo (o cerrar el anillo, expresión que se popularizó después), prolongando la autovía por Cenes de la Vega y llevándola desde allí hasta Jun tras atravesar el Valle del Darro y El Fargue.
La maquinaria administrativa se puso en marcha, aunque como ya se sabe que no se mueve precisamente a velocidad vertiginosa, el primer paso realmente serio no llegó hasta 2007. El 24 de enero de ese año, la Junta de Andalucía, entonces gobernada por el PSOE y con Manuel Chaves como presidente, encargó un estudio informativo, paso previo imprescindible para iniciar la construcción.
Los once trazados que se habían barajado hasta entonces quedaron reducidos a tres. Fueron los finalistas, por así decirlo. La Ronda Este empezó a tomar forma, aunque fuera sobre el papel. Se habló de una carretera de entre nueve y once kilómetros, de puentes y túneles que salvarían los nada desdeñables desniveles de una orografía complicada y hasta se apuntó un posible presupuesto inicial, que rondaba los 200 millones de euros.

El Valle del Darro, el único pulmón verde de Granada amenazado por el cierre de la Ronda Este. Foto: J.M. García
Un rechazo decisivo
Sin embargo, en 2009, el Patronato de la Alhambra, que dependía y depende de la Junta (que seguía gobernada por el PSOE) presentó unas alegaciones que significaron el final de esa iniciativa. El organismo, entonces dirigido por María del Mar Villafranca, se opuso tajantemente a la construcción de la carretera, argumentando que supondría «un impacto inasumible» para el monumento. Entendía la directora que no sólo se puede considerar la Alhambra como el edificio que corona la muralla, sino como un conjunto con trascendencia y dominio sobre un amplio entorno.
La Junta plegó velas, pese a lo cual la Ronda Este no se limitó a ser, para sus partidarios, un mero recuerdo. El Partido Popular, que desde el principio abogó por ella, la resucitó cada cierto tiempo. Durante el convulso mandato municipal que fue del 2015 al 2019, que empezó como alcalde el popular José Torres Hurtado y lo terminó el socialista Paco Cuenca, el grupo popular presentó en 2017 (ya en la oposición) una moción en la que instaba a la Junta a la construcción de la vía, que consideraba más que necesaria debido a la saturación de tráfico de la circunvalación. La propuesta fue rechazada.
El PP no desistió e incluyó el cierre del anillo en su programa electoral para las municipales de 2019. En ese año ya tenía en la Junta a un aliado, puesto que los populares habían desbancado del gobierno a los socialistas y el presidente era (y es) Juanma Moreno Bonilla. Dos años más tarde, es el gobierno autonómico el que abandera la idea. La granadina Marifrán Carazo, consejera de Fomento, la ha lanzado. Y Antonio Granados, delegado provincial de esa consejería (y el defensor en su día de la moción en el ayuntamiento granadino que fue rechazada) la ha desarrollado.
Es curioso, o a lo mejor no tanto, que todo esto se haya retomado justo ahora que los populares no están en el gobierno local. Lo compartieron dos años con Ciudadanos y en ese tiempo no se habló de la Ronda Este, pese a que, como ya se ha dicho, estaba en el programa electoral del PP. La autovía retorna ahora, cuando es el PSOE quien vuelve a estar al mando en la Plaza del Carmen.
Voces discordantes
Miguel Ángel Fernández Madrid, concejal de Urbanismo en Granada, no cree que eso último sea fruto de la casualidad y apunta a que esta Operación Rescate de la Ronda Este puede ser «una forma de otorgarle protagonismo a la consejera Marifrán Carazo y darle titulares». ¿Por qué? Pues porque, según el socialista, ella muy probablemente será «la candidata del PP en las municipales de 2023».
Miguel Á. Fernández Madrid, concejal de Urbanismo: «La Junta llegó a verla viable, posiblemente porque a Javier Torres Vela le pilló todo aquello con el paso cambiado»
Se muestra en contra de la construcción, «tan en contra como siempre lo he estado», aunque admite que el PSOE sí que cambió de opinión. «La Junta llegó a verla viable, posiblemente porque a Javier Torres Vela le pilló todo aquello con el paso cambiado y terminó apostando por la autovía», dice, en referencia a quien fuera el líder socialista local por aquel entonces. Añade que «hay que tener en cuenta que entonces el PP era una auténtica máquina electoral y eso influyó, pero por fortuna el debate se cerró con la tajante negativa de la Alhambra».
No ve Fernández Madrid ningún motivo para reabrir el debate porque «en todas las propuestas que se plantearon vimos que los trazados afectaban a muchas cosas. Hay que tener en cuenta que discurriría por un territorio muy sensible», afirma, para agregar que el ayuntamiento, de hecho, dispone ahora del estudio de una geóloga «que alerta sobre la vulnerabilidad de los suelos en un valle en el que, de ejecutarse la obra, tendrían que hacerse puentes y túneles».
Para el concejal, además del supuesto interés electoral, el PP tendría «un interés urbanístico, en el sentido de buscar que por esa zona fuera el crecimiento de la ciudad y su entorno. Si no, yo no le veo ningún sentido a que se empeñe en algo que ni es sostenible desde el punto de vista medioambiental, ni tampoco serviría para reducir el tráfico doméstico en la circunvalación, que a diferencia del pesado, que sí puede haberse desviado en parte con la segunda circunvalación, sí que sigue existiendo».
¿Será sostenible o no se hará?
Hay que centrarse ahora en la cuestión de la sostenibilidad. El delegado provincial de Fomento de la Junta, el ya mencionado Antonio Granados, dejó claro días atrás que, si se hace, la autovía será «absolutamente respetuosa» con el patrimonio cultural y ambiental de la zona. El estudio que ahora se ha licitado, incidió, no sólo debe buscar la viabilidad económica de la infraestructura, sino también «su impacto social y medioambiental». No lo dijo pero quedó flotando en el aire: si no es así, no se hará.

F. Ballesteros, Narciso Ruiz y José García, en Cultura, presentando petición para que al paraje se le dé máxima protección. Archivo
Francisco Ballesteros, presidente de la AAVV del Sacromonte, promete «rescatar», si hace falta, la Plataforma para la Defensa del Valle del Darro y «salir a la calle» si prospera el proyecto de la Junta
Para Francisco Ballesteros, presidente de la Asociación de Vecinos del Sacromonte de Granada, que la autovía sea absolutamente respetuosa con el entorno «es buscar la cuadratura del círculo», porque iría «contra el medio ambiente y contra todo», porque implicaría «no sólo hacer túneles y puentes, sino también viales y carreteras radiales de acceso».
Ballesteros fue uno de los impulsores de la Plataforma para la Defensa del Valle del Darro, que promete «rescatar» si hace falta. Entiende que ahora hay «muchas más personas que apuestan por la protección ambiental» y procuraría «sacarlos a la calle» si prosperara el proyecto de la Junta.
Una idea «del siglo pasado»
«El PP demuestra que no tiene ideas nuevas y rescata una que es del siglo pasado. No me extrañaría que de aquí a poco retomaran lo del teleférico a Sierra Nevada», relata el dirigente vecinal, que aconseja a la Junta que, si de verdad quiere «defender la sostenibilidad», apueste por «extender el Metro, que es lo que se debió hacer desde el principio».
Recuerda Ballesteros que, cuando se empezó a hablar del cierre del anillo, el contexto era «muy peligroso» para el Valle del Darro, puesto que estaba «abandonado» y, entre otras cosas, se dijo de hacer en la zona «una pantaneta navegable, un hotel y un campo de golf, además de la autovía al lado». Se alegra de que el Patronato de la Alhambra hiciera oír su voz, cosa que no tiene claro que vuelva a ocurrir si se da la ocasión «porque se debe a su dueño», y lamenta que esa victoria que el movimiento conservacionista alcanzó en 2009 no se completara con la protección integral en forma de Bien de Interés Cultural «para todo el entorno del Darro, hasta Beas de Granada y Huétor Santillán». Aquello no prosperó entonces, pero todavía se promueve.
Peor ve aún que los promotores del proyecto «vuelvan a la carga con su idea de llenar esto de asfalto», cuando además, en su opinión, sería una inversión «injustificada» y en contra de la tendencia de las administraciones públicas, «que apuestan por parques perimetrales, transporte público, metros… Siendo así, ¿qué sentido tiene la autovía, de verdad?», pregunta.

La hacienda de Jesús del Valle, zona donde se proyectó en su día un gran complejo con campo de golf. Foto: Jesús Ochando
La Alhambra habla pero no valora
Este periódico se puso en contacto con el Patronato de la Alhambra al entender que su opinión podía ser muy importante, sobre todo después del papel que jugó en 2009. La actual directora, Rocío Díaz, no hizo declaraciones de forma directa pero la institución sí que se pronunció. En síntesis, la opinión del patronato es que todavía es pronto para tener una opinión.
Fuentes del patronato explicaron que por el momento lo único que hay es el anuncio de la licitación de un estudio de viabilidad para determinar si la Ronda Este es o no factible. Teniendo en cuenta que sólo se trata de eso, subrayaron las fuentes, ni el organismo ni su directora ven conveniente aún hacer una valoración.
Un auténtico disparate, por la destrucción de un entorno que es un auténtico pulmón para nuestra provincia, por la tremenda dificultad orográfica que presenta y por el coste económico de proporciones astronómicas que supondría. Todo ello, además, para acoger a una pequeñísima parte del tráfico. Granada debe crecer por la zona de Jun y Pulianas.
Marisol