Cortar la Gran Vía

La protesta frente a la Subdelegación del Gobierno cortó por dos horas el tráfico en Gran Vía.

Quiero expresar mis impresiones sobre los acontecimientos del domingo 13 de mayo y a propósito de la concentración que impidió el tránsito de vehículos por Gran Vía frente a Subdelegación del Gobierno a partir de las 21.00h.

En primer lugar, y como participante en esa concentración, soy consciente de que provocó molestias a muchos granadinos, conciudadanos míos, y a título personal, y con el corazón en la mano, quisiera disculparme sinceramente por las molestias que hayan podido sufrir. Sirva mi disculpa de introducción para explicar los motivos de la concentración, es decir, la causa que me llevó a decidir que la protesta era legítima y requería la acción que tuvo lugar.

El domingo por la mañana, y con motivo del aniversario de las manifestaciones del 15 de mayo de 2011 con las que se inició el Movimiento 15M, había un grupo numeroso de personas concentradas en la plaza del Carmen. La intención no era otra que reunirse para analizar y debatir sobre las actividades que se han desarrollado a lo largo del último año y que se «sembraron» en ese lugar. Las reuniones y asambleas del movimiento se plantean, siempre que es posible, en lugares públicos con objeto de reivindicar que tenemos derecho a disponer de ese espacio de forma respetuosa porque es de todos.

Resumiendo mucho los hechos, sobre las 13.00h del domingo 13 de mayo, sin causa aparente, la policía procedió a identificar a los participantes en las reuniones, dos de los cuales no accedieron y fueron llevados a comisaría tras un forcejeo entre las personas reunidas y los agentes (hay imágenes en Internet). Aquí me gustaría explicar que cuando un agente de policía te pide identificación por el hecho de estar reunido en una plaza a plena luz del día, la sensación es de desconcierto e impotencia. Y esa sensación la conozco porque me han identificado en tres ocasiones desde mayo pasado.

Las dos personas que se negaron a identificarse lo hicieron en protesta por esa situación absurda, en la que la identificación no responde a motivos de seguridad, porque la concentración era pacífica y respetaba a los viandantes. Sin entrar en los porqués de todo esto, les pediré a los lectores que intenten ponerse en el sentimiento de la gente que había en la plaza, igual que yo intento ponerme en la situación de aquellos a los que la concentración de la tarde en Gran Vía causó molestias.

Si escribo esto es porque considero que los granadinos tienen derecho a una explicación, igual que tienen derecho a reunirse en la calle.

Atentamente,
Una granadina

NOTA DE LA REDACCIÓN: Los detenidos el domingo en la Plaza del Carmen quedaron absueltos esta mañana en un juicio rápido por faltas.

(14/05/2012)