[Reportaje sobre el pasado y presente de Santa Bárbara. Fotos y video: Jesús Ochando]
Los trabajadores de la fábrica Santa Bárbara Sistemas miran al futuro como el que se asoma a un precipicio. Hasta tres regulaciones de empleo ha padecido la plantilla en las últimas décadas. Es como si cada cierto tiempo sus trabajadores se vieran obligados a jugar a la ruleta rusa, o quizá habría que decir norteamericana, la que hace girar desde el año 2001 la multinacional General Dinamics, la encargada de decidir la suerte de 693 empleados, 54 de ellos de la factoría de El Fargue en Granada que cuenta con una plantilla de 128 personas.
Lo que muy pocos conocen en Granada es la historia de la que ha sido una de las principales empresas de la provincia por su importancia estratégica nacional y una de las más antiguas del mundo, según se atreve a asegurar el historiador y vecino de El Fargue, Francisco González Arroyo, quien ultima su tesis doctoral sobre la fábrica de pólvora y explosivos de Santa Bárbara.
“Me indigna pensar que la empresa más antigua del mundo, si damos por bueno que ya existían molinos de pólvora en 1230, esté viviendo estos días su defunción, y que una parte de la sociedad muestre su indiferencia y no sepa lo que representa”, lamenta.

Imagen de una parte de las instalciones de la fábrica de Santa Bárbara, en El Fargue.
El padre del investigador granadino trabajó 43 años en la fábrica y su hermano siguió los pasos del progenitor, por lo que toda su vida ha estado ligada a este lugar. De hecho, parte de la vivienda familiar donde nació se encontraba en el interior de la factoría.
Molinos anteriores al reino nazarí
En su tesis sostiene que los antecedentes de la fábrica se remontan “casi con certeza” a la existencia de dos molinos de pólvora antes de que se fundara el reino nazarí. Incluso da como posible fecha el año 1230. Se tiene constancia de la producción de pólvora en época musulmana y en el posterior reinado de los Reyes Católicos, que delegaron la gestión en el gobernador de la Alhambra.

La guerra en Marruecos, de trasfondo.
Los molinos pasaron a ser patrimonio de la Real Hacienda hasta enero de 1810, momento histórico protagonizado por la ocupación francesa. Su presencia en Granada se prolongará hasta septiembre de 1812, fecha en la que deciden evacuar la ciudad y prender fuego en su huida a los molinos de pólvora.
Según el historiador granadino, a partir de 1819 dos empresas se hacen con los destinos de la fábrica hasta que en 1850 asume la gestión técnica el Cuerpo de Artillería en colaboración con la Real de Hacienda, propietaria de los molinos que cedería en 1865 todas las competencias al ejército.
A partir de finales del siglo XIX es cuando se inicia la fase de expansión, el desarrollo de un proyecto para modernizar la fábrica y producir pólvora sin humo que tendrá como nombres propios al coronel Pompeyo Izquierdo y Burló, el comandante capitán José Calera López de Argueta y el coronel Ricardo Aranaz.
Este último fue el artífice de que en El Fargue se fabricaran proyectiles, torpedos y granadas rompedoras utilizadas con éxito, según recoge la prensa de la época, en la guerra con Marruecos, lo que le valió que fuera nombrado hijo adoptivo de Granada. “Cuando surgió la guerra en el Norte de África, el Fargue había dado al Gobierno tranquilidad y fe en el porvenir de nuestras armas. El personal que en ella dirige y trabaja merece bien de la Patria” (La Correspondencia de España, 6 de septiembre de 1909).
Pólvora marca Alfonso XIII
La importancia que cobró entonces la fábrica para la organización militar nacional y el abastecimiento de armamento al Ejército lo demuestra el hecho de las visitas que a principios del siglo XX realizaban las autoridades reales y militares. Alfonso XIII se acercó a las instalaciones en 1904 y a principios de diciembre de 1908. El monarca, al igual que su nieto, era, por lo que cuentan las crónicas, muy aficionado a la caza, y acudía con frecuencia a una finca de Láchar (Granada) a matar perdices y libres junto a otros representantes de la nobleza. Como anécdota resaltar que en la factoría de El Fargue se fabricaban unos cartuchos con pólvora de la marca Alfonso XIII.
Mujeres en huelga

Mujeres defienden sus derechos.
Ya por aquella época el trabajador defendía sus derechos con determinación. No sólo ellos. Las mujeres que echaban horas en la fábrica no encajaban bien los atropellos. Así, podemos encontrar un suelto informativo con más de un siglo de antigüedad en el que se da cuenta de la huelga protagonizada por un grupo de cincuenta mujeres que vieron rebajados sus sueldos [Ver imagen de la derecha]. A los pocos días se dio por terminado el conflicto laboral después de que los responsables de la fábrica accedieran a abonar 3 pesetas por cada cien paquetes de pólvora.
De igual modo en julio de 1913 aparece una noticia en un diario local informando de una huelga de trabajadores motivada por el despido de un compañero, del que no se dan más detalles.
Enseñanza
Las crónicas de los periódicos de la época cuentan que ya a principios del siglo XX los obreros de la fábrica de pólvora contaban en la barriada con escuelas, una iglesia y un pequeño teatro donde se representaban comedias y zarzuelas. Muy posiblemente dicho teatro sirviera con el paso de los años para proyectar películas. El historiador González Arroyo recuerda haber asistido a la sala cinematográfica donde se proyectaban películas a partir de los años 40 al precio de una peseta, precio que no se alteró hasta su cierre en 1970.
Según cuenta González Arroyo, la enseñanza que se impartía a los obreros respondía a los adelantos de la moderna pedagogía. No duda en aseverar que contaba con una de las mejores escuelas de formación de toda España.
También disponían de una banda de música, ‘los obreros polvoristas’, que obtuvo un año el primer premio de bandas civiles.
La Guerra Civil
El punto álgido de la producción tuvo lugar, según afirma el historiador, durante la Guerra Civil. “La fábrica fue la razón fundamental por la que Granada fue objetivo de los sublevados desde el primer día, porque les podía garantizar el suministro que necesitaban”, precisa. Durante la contienda fratricida se llegaron a producir más de 980.000 kilos de pólvora y más de 1.250.000 kilos de explosivos. Apenas había dependencia del exterior. Casi todo lo que se hacía en los avanzados talleres de El Fargue era de elaboración propia.
La decadencia
El declive llega en 1961 cuando se transfiere del estamento militar al Ministerio de Industria. Es entonces cuando se crea la empresa Santa Bárbara y cuando, según el historiador, “se empieza a conceder importancia a la cuenta de resultados». “Si una empresa es fundamental para el suministro de los ejércitos no se puede buscar una rentabilidad si no se le abren vías comerciales porque, en caso contrario, tiene que depender de un único cliente, en este caso el estado español”.
A partir de entonces se han sucedido varios recortes de plantilla, incluida la entrada en el accionariado de la multinacional General Dinamics que en estos días ha puesto sobre la mesa un duro plan de ajuste. Para muchos la puntilla, el tiro de gracia, como queda recogido en el video que encabeza esta información donde se incluye, además de los apuntes históricos de González Arroyo, la opinión de trabajadores, algunos de ellos ya jubilados.
El futuro de Santa Bárbara puede conocerse en los próximos días. De momento no hay acuerdo. Los trabajadores rechazan los términos de la oferta que la empresa ha puesto encima de la mesa. Aseguran que agotarán todos los cartuchos para tratar de defender sus puestos de trabajo pero pintan bastos.
Fotos y video: Jesús Ochando
Noticias relacionadas:
(12-3-2013
[…] Todos hemos sido informados, por unos u otros medios, de las protestas de los trabajadores de Santa Bárbara, la fábrica de pólvora de El Fargue. Pero detrás de estos titulares dramáticos sobre sus empleos está también la historia de una fábrica histórica, que según la teoría del historiador Francisco González Arroyo, podría ser la empresa más antigua del mundo. Hablamos del año 1230. En GranadaiMedia, Álvaro Calleja y Jesús Ochando repasan esta tesis y la situación de los trabajadores de Santa Bá…. […]
Granada despierta repasando la historia de Santa Bárbara y con cantón en el Zaidín | Granada despierta
¿Podríamos en este mundo ir dejando de fabricar armamento?
Mariano
Reuerdo como todas las tardes de los años 53/58, bajaban de la fábria de polvora, 10 0 12 camiones, chebrolet y otros modelos de la guerra civil, cargados con 25 o 30 personas, todos ellos trabajadores de dicha fabrica en el FARGUE. Las imagenes que almacene en el recuerdon, son estampas sacadas de cualquier pelicula de la2ª guerra mundial. Camiones pintado de «caqui» militar y que por supouesto eran del ejército.
antonio S. Bono
Se podrían dejar de hacer tantas cosas… pero en esta noticia, creo que lo más importante, es la cantidad de obreros y en consecuencia familias que dejarán de percibir sus ingresos.¿O es que al abogado de turno, que defiende a un sujeto condenado justamente, también deberíamos dejarlo sin comer? Por favor entendamos la noticia y el por qué de la preocupación de estos trabajadores.
Marina
pero nadie se ha parado a pensar que ahí fabrican guerra? es una mierda el desempleo, pero vamos a reconvertirnos, ahora o nunca.
no
Es absurdo y muy reduccionista pensar que si España no fabrica armas no comprará armas. Más bien sucederá al contrario, mientras en Granada cerramos nuestra industria y despedimos a nuestros trabajadores, otras factorías de naciones extranjeras y politicuchos de tres al cuarto esperan frotándose las manos para hacer negocio a costa nuestra. A pesar de que la General Dynamics americana es una industria armamentística puntera -fabrica F-16, helicopteros, tanques, etc- , no ha traído ni un sólo nuevo contrato para fabricación de armamento. General Dynamics se ha limitado a cumplir con lo que ya había pactado y a cerrar. Básicamente, lo sucedido es como si entregaramos nuestro negocio a la competencia. ¿Acaso se preocuparían de rentabilizarlo?. Ellos tienen la certeza de que después de los despidos la cadena de fabricación no podrá continuar operativa, no habrá suficiente personal para hacer funcionar la fábrica.
Raro, raro,…¿No será que nuestros politicastres han optado por poner una empresa estratégica en manos extranjeras para que nos cierren nuestra producción y luego estos mismos de la Dynamics puedan vendernos el armamento de USA a precio de oro y con golosas comisiones? Ya sabéis que el mayor productor de armas del mundo, no es España precisamente, sino EEUU.
José
Amiga marina la polvora tambien se utiliza para mas cosas por ejemplo para las canteras o para que el estado de defensa tenga con que defenderte y para mas cosas pero no olvides que esas personas tienen familia igual que tu y tienen derecho a comer ademas si no lo fabrican ellos lo fabricaran otros.vive y deja vivir.
teodora
Teodora, antes de poner un comentario, deberías de leer bien el resto, Marina está diciendo exactamente lo mismo que tú.
La cuestión no es si en esta fábrica se fabrican o no productos morales, el problema es que en este mundo no sabemos vivir sin un elemento que blandir contra los demás.
España seguirá utilizando armas para matar con la excusa de misiones de paz, y esas armas, o las producimos en casa o nos las venden los americanos…
En este contexto, creo que no nos queda más remedio que luchar por estos trabajadores, y porque no surja más desempleo, no es una cuestión de armas, es una cuestión de quién las produce…
Santa Bárbara es el ejemplo perfecto de empresa dirigida por ladrones y especuladores, no creo que debamos dejar que nos atraquen, como ya han hecho en numerosas ocasiones.
Sergio
Pero vamos a ver, entregarse a que siga lo malo por muy malo que sea o por muy malo que pueda ser, es una sinrazón.
¿Por qué aún no tenemos una cultura cooperativa donde los trabajadores cuando quieran prescindir de ellos se hagan con las fábricas y reconviertan la producción? Hay miles de productos que compramos de fuera y podemos producir aquí, generando empleo. Y eso funciona, pregúntenle a los argentinos cuando el corralito y las tomas de fábricas, pasando a manos de los trabajadores.
no
[…] comité de empresa de los trabajadores de Santa Bárbara estuvo presente en el pleno. Representantes de todos los partidos les recibieron con saludos y […]
Últimos días de la teleasistencia municipal | #plenogr
Mi padre, primos, tíos, abuelos (uno de ellos murió por una exposición en el taller de nitracion), visabuelo y tatarabuelo han trabajado en esta fábrica.
Yo mismo nací y me crié con mis hermanos en una casa que la fábrica dejaba a sus trabajadores.
Esto es para mi una tragedia pues aun conservo primos y amigos trabajando en la fabrica de polvoras
German
Germán, estoy haciendo una tesis doctoral sobre la cultura y la vida en Granada en la primera mitad del siglo XX, realmente me encantaría y me ayudaría muchísimo poder ponerme en contacto contigo de algún modo. Mi email es fatimamartin@ugr.es y te agredecería mucho que me contactaras.
PD: Me parece un artículo muy interesante 🙂
Fátima
Gracias a la Fábrica de Pólvoras,El Fargue ha sido siempre donde menos paro hubo.los obreros tenían casa gratis, la Escuela de Aprendices fue una especie trampolín para trabajar con éxito en la Empresa privada,dio trabajo a Pueblos como, Alfacar, Viznar, Huetor Santillán y de la capital, lo demás son simples especulaciones y no realidaddes
manuel