Otro plante de parados de La Paz

Desempleados de La Paz intentan paralizar unas obras que dotarán de un gimnasio al instituto. Piden que se contrate a gente del barrio. «La Junta de Andalucía se ríe de nosotros», aseguran. Fue el elevado paro en la barriada de La Paz el detonante del encierro en la Curia de 1975.

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«La Junta se ríe de nosotros», asegura Juan Heredia, presidente de la asociación de vecinos de La Paz,  que ha liderado este lunes 18 de noviembre la protesta de un grupo de parados en una obra que ejecuta el gobierno andaluz en el IES La Paz.

Las obras, dentro del Plan Ola, dotarán de un gimnasio al instituto y tienen un presupuesto de algo más de 327.000 euros. Los trabajos, adjudicados a la constructora sevillana Díaz Cubero, deberán ejecutarse en cuatro meses y medio, de los que ya ha transcurrido uno. Cuando la Junta de Andalucía anunció la inversión, aseguró que se crearían 16 puestos de trabajo.

La asociación de vecinos de La Paz defiende que el Plan Ola del gobierno andaluz, establece que el 80% de los contratos debe ser a desempleados del barrio. Hoy en la obra había un vecino del distrito Norte y otro de Maracena. Según el jefe de la obra, también ha estado trabajando otro vecino del barrio, como encofrador, cuyo contrato ya ha terminado.

Después de pactar una ‘tregua’ con el jefe de obra, los vecinos de La Paz sostuvieron una entrevista con el delegado de Economía, José Antonio Aparicio, quien les aseguró que «en todo Norte no hay ningún oficial de primera registrado en la oficina del SAE», algo que resulta extraño a los parados, dado que gran parte de los desempleados del distrito han estado trabajando toda su vida en la construcción.

Una respuesta similar dio a GranadaiMedia la Delegación de Educación para explicar por qué hay un parado de Maracena contratado en la obra y enviado por el SAE: «igual es que en toda Granada no hay nadie con la cualificación demandada por la empresa».

(NOTA: GranadaiMedia intentó conocer la versión de la empresa, que de momento no ha querido pronunciarse).

Heredia defiende que llevan meses negociando con la delegada de Educación, Ana Gámez y que con el diálogo ha sido imposible llegar a un acuerdo.

El director del instituto, Juan de Dios Gayoso, se acercó hasta la obra alertado por el jaleo inicial de la protesta. Gayoso, que recordó a los parados que les acompañó al encuentro con la delegada de Educación, les hizo notar que no estaba bien que los escolares fueran testigos de cualquier altercado, porque «ya tienen bastante con verlos en el barrio».

También la presencia policial contribuyó a rebajar los ánimos. Uno de los agentes conminó a los parados a denunciar «si hay un fraude de ley», pero también a evitar incurrir en una ilegalidad como la paralización de una obra sin una orden judicial.

No es la primera vez que los parados de La Paz paralizan una obra. El año pasado lo hicieron con los trabajos de acondicionamiento de varias calles promovidos por el Ayuntamiento. Entonces consiguieron un puesto de trabajo, que se adjudicó por sorteo.

Desde entonces, en todas las obras que ejecuta el gobierno local en el barrio, se está contratando al menos a un parado del barrio, según aseguraron Heredia y el concejal de Empleo, Jorge Saavedra, a GranadaiMedia en la última visita del alcalde a La Paz.

«Queremos que se construya el gimnasio, porque es para nuestros hijos», explica el representante vecinal, «pero no estamos dispuestos a permitir que no se cuente con los desempleados del barrio».

El desempleo crónico de Norte

La situación de desempleo en la inmensa mayoría de los barrios del distrito Norte es crítica. Muchas de las entidades y ONGs que trabajan en el distrito cifran en el 70-80% de su población activa el porcentaje de paro. A 31 de marzo de 2013 el SAE tenía registrados 7674 demandantes de empleo en los códigos postales 18011 y 18013, que casi en su integridad corresponden a Norte.

Lo peor es que ya se trata de un mal endémico. En 1975 un grupo de obreros de la construcción del distrito decidió encerrarse en la Curia. Para entonces había un gran descontento social en el barrio porque el 40% de los peones estaban en el paro.

Cuenta Antonio Ramos Espejo en la revista ‘Triunfo’, en una crónica sobre el encierro del 75, que el detonante fue una encuesta llevada a cabo por un grupo de vecinos de barriada de La Paz y publicada por Ideal el 18 de abril de 1975. Los vecinos fueron casa por casa y realizaron 2177 encuestas, que dieron como resultado un 38% de desempleo. Entonces sólo el 57% de los padres de familia tenían un puesto de trabajo.

Crónica de Antonio Ramos Espejo sobre el encierro en la curia en 1975. Revista Triunfo

Crónica de Antonio Ramos Espejo sobre el encierro en la curia en 1975. Revista Triunfo

El propio Espejo menciona en ‘Crónica de un sueño. Memoria de la Transición en Granada’, un comentario de Rafael Martínez Miranda en aquel artículo de Ideal que aludía a la injusticia «de un sistema que tiene que basarse en que los que menos tienen se aprieten el cinturón con frecuencia para que los que están mejor situados continúen en su prosperidad».

No han cambiado las cosas demasiado para los vecinos de Norte, que también se quejan ahora, como entonces, del «desprecio de las autoridades». El año pasado tres parados de Casería de Montijo se encerraron en la Curia para llamar la atención sobre la incapacidad de muchos vecinos para cubrir sus necesidades básicas.

El mismo Aparicio que recibió este lunes a los parados de La Paz se reunió con ellos en marzo y se comprometió a «colaborar en la elaboración de un plan especial de empleo (PFEA especial) para la Zona Norte», que según indicó correspondía al Ayuntamiento de Granada «protagonizarlo y solicitarlo».

Trabajo, precisamente, fue lo que le pidieron varios vecinos del barrio al alcalde, durante una visita que realizó la semana pasada a La Paz.

(18-11-2013)

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