García Montero rectifica, «si es que esto es rectificar», y devuelve la biblioteca de las Palomas a la Junta, a la que insta a cumplir su compromiso para que los ciudadanos desarrollen su proyecto de gestión compartida de este espacio. El Gobierno andaluz no parece dispuesto a recoger un testigo que, a su entender, compete al Ayuntamiento.
El Ayuntamiento proyecta devolver el edificio de la biblioteca al Gobierno andaluz, según el orden del día de la Junta de Gobierno Local de mañana, 21 de diciembre. La Junta dice que la devolución era obligatoria por el cambio de uso del inmueble. Los vecinos reciben con cautela la «inesperada noticia».
Al ritmo del ‘No puedo vivir sin ti’ de Los Ronaldos, decenas de zaidineros han reclamado la apertura de la biblioteca en la plaza del Carmen y la Fuente de las Batallas. La original protesta coincide con el aniversario del desalojo de los vecinos que opusieron resistencia pacífica al traslado de los libros.
Como estaba previsto, el edificio de las Palomas se cederá al grupo de bailes regionales, que ofrecerá clases por una cuota mensual de unos 10 euros, según ha trasladado García Montero a la plataforma por la reapertura de la biblioteca en el encuentro que han mantenido esta mañana. El edil abre la puerta, sin embargo, a compatibilizar la danza con un Club de Lectura.
Armados con libros, cerca de 30 miembros de la plataforma por la reapertura de las Palomas se encierran en Los Mondragones hasta conseguir que el concejal de Cultura se comprometa a reunirse con ellos. El colectivo ciudadano había pedido un encuentro con García Montero en siete ocasiones, sin éxito hasta ahora.
Trabajadores municipales han medido el edificio de la biblioteca esta mañana, mientras un operario reponía la cerradura. García Montero se cierra a explicar el futuro uso de las Palomas, por la que los vecinos llevan luchando más de un año.
