
Alumnos, profesores y jueces del I Torneo de Debates.
La estrategia del miedo como herramienta de control global, el uso de la guerra por parte de los países ricos para controlar los recursos naturales y hacer caja, la concentración de la riqueza generalizando la miseria… frente a las posibilidades de crear lazos a escala internacional para eliminar paulatinamente la pobreza del mapa. Son algunos de los argumentos que alumnos de cinco centros educativos han esgrimido a favor y contra de los efectos de la globalización en el Tercer Mundo, tema controvertido que ha centrado el I Torneo de Debates Intercentros de Granada, celebrado este 24 de abril en el IES Alhambra, enclavado el Zaidín.
Armados con la palabra y divididos por equipos -seis en total- los estudiantes se han enfrentado en este ‘combate’ dialéctico sin saber si tendrían que defender o rebatir el tema, ya que la postura se sortea al inicio del debate. Lógica y emociones han entrado en el discurso, en el que cada grupo ha contado con cuatro turnos (uno por orador) de tres minutos para exponer sus argumentos de partida, refutar los de su rival y resumir conclusiones. En sus intervenciones los ponentes han intercambiado ideas a favor y contra, con posibilidad de interpelar al grupo ‘adversario’ en el ecuador del debate.
«Más allá del enfoque empresarial que suele darse a este tipo de iniciativas, destacaría el enriquecimiento que supone para la democracia y la ciudadanía porque implica tomar postura en un asunto y el respeto de ideas contrarias», explica Andrés Rueda, profesor de Filosofía del IES Montevives (Las Gabias), uno de los centros participantes, junto al Zaidín Vergeles, Cartuja, Alfonso XI de Alcalá la Real (Jaén) y el propio IES Alhambra, con dos equipos.
El docente destaca el potencial de los debates como herramienta educativa, ya que permiten el desarrollo de competencias como «trabajar en equipo, la búsqueda de información para documentar el tema, hablar el público, la capacidad de retórica, la exposición y conexión ideas…».
Precisamente con intención de «promover la oratoria, la reflexión y el pensamiento crítico» el departamento de Filosofía del IES Alhambra decidió impulsar este torneo, indica su responsable, Consuelo Aguayo, que ha contado con la colaboración del Aula de Debates de la Universidad de Córdoba y la asociación Babel para su organización.
Los integrantes de este último colectivo han ejercido de jurado del debate, para lo que han analizado el planteamiento y respuesta de cada grupo, así como el fondo y la forma de cada orador, detalla su presidente, Pepe Herrero. Para la evaluación, en los casos en los que no han alcanzado un consenso, han tenido en cuenta 20 parámetros, entre éstos, la veracidad de los argumentos, su rigor, diversidad, profundidad, la naturalidad y expresividad, el dominio de la voz y los silencios, la agilidad en las respuestas o la actitud respetuosa.
Sobre estos aspectos los alumnos han recibido críticas constructivas una vez cerrado el debate. Este feed back les ha permitido corregir y mejorar los ‘flecos’ de su discurso, así como reforzar sus puntos fuertes de cara a la segunda ronda. «No es fácil porque tienen que dejar claros sus argumentos sin simplificarlos, ser didácticos sin caer en la demagogia, dos extremos que se tocan», advierte Herrero.
La asociación Babel, que surgió del grupo de debate creado por este estudiante de Medicina en colegio Mayor Isabel la Católica, ya impartió un taller en el IES Alhambra para enseñar estrategias basadas en la práctica. Salir a escena es «la única forma de corregir errores», señala Herrero. De ahí que el colectivo utilice esta metodología basada en la experiencia en sus cursos, dirigidos a estudiantes de Secundaria, Bachillerato y universitarios. «Nuestro objetivo es impulsar el club de debates oficial de la UGR», indica el presidente de Babel, una iniciativa que impulsaría esta costumbre «propia de los países anglosajones y con poca tradición en Granada», destaca Rueda.
«Se trata de una actividad muy interesante que se debería fomentar más», propone Amina Tkzaini, alumna del IES Cartuja, centro finalista junto al IES Alfonso XI, que se ha alzado con la victoria. Tanto esta estudiante de 4º de Eso como sus compañeros de equipo –Amin Badri, Antonio Jesús Cara y Daniel Ballesteros– afrontaban por primera vez el reto de medir su locuacidad. «Hemos echado muchas horas extra los fines de semana para prepararnos a fondo el tema», comentan. «La iniciativa ha resultado estimulante y motivadora para ellos, hasta el punto de volcarse más en preparar el debate que el examen», bromea su profesora de Historia, Alicia Sánchez.
«Adelantaremos las futuras ediciones para alejarlas de la fecha de evaluación», anuncia el director del IES Alhambra, José Nogueras, con intención de que esta iniciativa interprovincial «pionera» tenga continuidad por su «valor educativo».
Y es que con independencia del torneo de fondo, premiado con 100 euros para el mejor equipo y 50 para el mejor orador -en este caso Lola Zafra, del IES Alfonso XI– todos han aprendido habilidades vinculadas al debate, con una gran lección de fondo: la inexistencia de verdades absolutas. Todo depende del prisma con el que se observe.
¡Danos tu opinión!